NOTAS / MAYO 2012
Volver

Conti en el río
Conti en el río
Entre el río y las canciones

Homenaje a Haroldo Conti, a 36 años de su desaparición

Con un concierto en el Centro Cultural, Juan Quintero y Edgardo Cardozo recordaron al novelista del río. Su casa en el Delta de Tigre ya forma parte de la Red Nacional de Sitios de Memoria que coordina el Archivo Nacional.

La casa de Conti La casa de Conti La casa de Conti La casa de Conti La casa de Conti La casa de Conti La casa de Conti

La casa del río

Frente a la casa de Conti en el Delta, Eduardo Jozami, director del Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, trazó un paralelismo entre la vida del autor y uno de sus relatos clásicos: “Ustedes saben que Haroldo Conti era un viajero impenitente. Uno podría decir de él lo que dijo en La balada del álamo Carolina sobre ese árbol que se iba alejando de los pastos, que crecía y que en algún momento sentía que le nacía un camino adentro. Y a Haroldo también le nacía un camino adentro. Un camino que iba del río a Buenos Aires. De Buenos Aires a Chacabuco (su lugar de nacimiento).”

Además, repudió al gobierno militar -que incluso llegó a asumir el crimen del escritor de forma explícita- y se refirió al proceso de recuperación de la memoria que se viene llevando a cabo en la última década: “Podemos estar seguros -con todas las dificultades que hoy tenemos, con todas las cosas que aún nos faltan- que estamos transitando el camino correcto. Estamos recuperando para los argentinos el derecho a la memoria y hacer memoria es una condición ineludible, indispensable, necesaria para poder construir una sociedad que esté en condiciones de mirar con confianza hacia su futuro para construir el país que quisieron Haroldo Conti y tantos otros militantes que entregaron su vida en aquellos años.” Concluyó Jozami.

Paredes cubiertas de barcos: barcos encuadrados, estáticos, permanentes. Algunos libros en los estantes, fotos del Che desperdigadas, las camas hechas, el sol fuerte en el altillo. En la casa de Conti, los visitantes pueden conocer distintos aspectos de su vida: periodista, novelista, cuentista, poeta, guionista, docente, navegante, piloto civil y hasta empleado de banco, haciendo hincapié en el vínculo indisoluble entre su obra y una de sus mayores pasiones: el río. Cuenta también con una biblioteca que incluye tanto libros de Conti, como ejemplares de la literatura universal y material específico sobre la temática de derechos humanos.

Si bien la Casa de Conti funciona como museo desde el 2009, a partir de ahora se vinculará institucionalmente con otros espacios que abogan por la recuperación del pasado y la lucha de los derechos humanos. El Archivo Nacional de la Memoria se encarga de centralizar toda la información relativa a los espacios de la memoria y sirve como fuente para los querellantes en las causas por delitos de lesa humanidad.

Participaron de este primer encuentro, que se prolongó desde el mediodía hasta las primeras horas de la tarde, tanto de familiares de Conti, estudiantes y habitantes de la isla, como el intendente de Tigre, Sergio Massa, funcionarios de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y del Municipio de Chacabuco.

El concierto

El 5 de mayo -día del escritor bonaerense, justamente en homenaje a Conti- y ante un auditorio repleto, las guitarras y voces de Juan Quintero y Edgardo Cardozo se hicieron presentes en el Centro Cultural. Continuidad indisociable con la vida del escritor, el gran protagonista de la velada fue el río. Los cantautores combinaron producciones propias con composiciones nacidas a partir de algunos poemas del poeta litoraleño, Juan L. Ortiz.

“Es muy importante para nosotros estar en un lugar como este, ganado para la luz” señaló Juan Quintero, antes de comenzar con una versión del famoso poema “Luna”. Desde los jardines de la Ex ESMA se multiplicaron más caminos adentro de los árboles. En el Delta, la literatura vuelve a sobrevivir: esta vez, en barcos de papel.