Imágenes mudas del saqueo en la puna catamarqueña; el sonido de la construcción de una autopista; los tesoros de un tío desaparecido; las manos de las archivistas de las Madres de Plaza de Mayo; la ficción casera que un padre rodó sobre las luchas ferroviarias en los años ‘90; otro padre y una película inconclusa sobre los levantamientos de diciembre de 2001; las resonancias de la Semana Trágica en las calles valladas del centro porteño; una sirena de río transconurbana; los campos agonizantes regados de agrotóxicos; una “no me olvides” creciendo pujante en un jardín.
Confirmamos que hay horizonte(s) posible(s) cuando nos convocamos alrededor de la luz de la pantalla, en esta comunidad de anónimxs que formamos cuando las luces se apagan y el sonido nos abraza.
Nos convocamos a escuchar(nos) y a ver(nos) como un acto laico de fe colectiva.
Azul Aizenberg y Tatiana Mazú González
Docentes
